En los manuales, documentales,
artículos, clases y libros de filosofía, podemos encontrar una falsedad
histórica que se ha elevado a la categoría de verdad. De tanto repetirla y con
tanta seguridad, es una afirmación que no se discute y se da por demostrada,
contrastada y finiquitada. Vamos a demostrar que la filosofía no se inventó en
la Grecia clásica en torno al siglo V a.n.e.
En primer lugar, tenemos que ponernos
de acuerdo sobre qué es filosofía y luego verificar si lo que entendemos por
ella ha aparecido o no en la historia de la humanidad en otras culturas antes o
al mismo tiempo que en Grecia.
¿Qué es filosofía? Ni siquiera los
filósofos nos ponemos de acuerdo. Para unos es una ciencia del pensamiento en
cuanto reflexión sobre las partes, por ejemplo, sobre las distintas ciencias.
Para otros es una ciencia de los fines y principios, por lo tanto, una ciencia
no empírica, sino especulativa, que se ocupa de los límites conceptuales. Para
otras tendencias, la filosofía es sencillamente la actividad que desarrollan
los filósofos, un pensar reflexivo que permite ordenar el mundo objetivo y la
posición que el yo debe asumir en él. Como podemos ver, en todas estas
definiciones encontramos un elemento común, la acción reflexiva del pensamiento
humano. Es decir, filosofar es, en definitiva, pensar el mundo y el hombre.
Entonces ¿cuándo comenzó el ser
humano a pensar? Obviamente, mucho antes de que aparecieran en escena
Pitágoras, Parménides, Tales y el resto de sabios de la Antigua Grecia. Así que
la filosofía como reflexión ordenada, lógica, conceptual o
imaginativa/intuitiva es muy anterior al siglo V a.n.e.
Es tan obvio lo anterior que podría
parecer que pasamos algo por alto. Preguntemos a un filósofo actual por qué
se afirma que la filosofía comenzó en Grecia hace 2.500 años y así saldremos de
dudas. Este filósofo nos aclara que tal afirmación se hace porque es en la
Grecia Antigua donde encontramos por primera vez en la historia a personajes
que, si bien es cierto que no son filósofos, sino físicos o científicos,
pusieron por escrito una descripción de las causas del mundo de una manera
racional. Esto nos obliga a aclarar que expresar por escrito el pensamiento filosófico
es algo accidental a la actividad filosófica y no esencial, así como la forma
racional del método de trabajo tampoco es esencial, sino circunstancial. Por lo
tanto, el hecho de que en el siglo V a.n.e. aparecieran en Grecia pensadores
que explicaron el mundo de manera racional no demuestra que la filosofía
surgiera por vez primera en esa cultura y en ese siglo, porque otro tipo de
filosofías aparecieron en Oriente por aquella época.
Podemos presentar tres ejemplos. Uno
es Siddharta Gotama, cuya actividad filosófica le llevó a concluir que la causa
del sufrimiento humano es un mal enfoque de los problemas personales. Además,
propuso un método lógico y práctico para superar el sufrimiento, el Noble
Óctuple Sendero. Otro ejemplo es Confucio, quien teorizó sobre política y ética
usando un método deductivo y dialéctico muy similar al usado por Platón. Ambos
autores son del siglo VI a.n.e., uno de India y otro de China. El tercer caso
es Lao-Tsé. Su filosofía es tan enigmática y profunda como la de los
presocráticos y muy anterior a Confucio, quien se inspiró, en parte, en su
saber.
Así, demostramos de manera inequívoca
que la afirmación de que la filosofía comenzó en Grecia en el s. V a.n.e. es falsa.
No obstante, el filósofo consultado
nos aclara, en un último intento por justificar la afirmación tradicional que
lo que se quiere afirmar es que en la Antigua Grecia lo que comenzó por primera
vez, como algo totalmente original, no es la filosofía, sino la manera más
genuina de filosofar. Vale y ¿cuál es esa manera más genuina? La que no se
fundamenta en cuestiones religiosas ni mitológicas. ¿Quieres decir que la
filosofía no puede tratar cuestiones religiosas ni mitológicas? ¿Acaso los
filósofos llamados presocráticos no se fundamentaron en cuestiones religiosas
ni mitológicas? No lo sabemos porque de sus textos se han conservado apenas
algunos trozos y no la totalidad de su obra. La forma más genuina de filosofar
no es el pensamiento abstracto y racional, pues este es una de las variadas
herramientas de que dispone el filósofo, ni la más genuina, ni la más eficaz.
Otro argumento que desmonta la
falsedad de la afirmación categórica que tratamos es que la filosofía se ocupa
también de la ética y no sólo de describir las causas teóricas de la
naturaleza. ¿Encontramos filosofía ética en otras culturas distintas a la
griega y con anterioridad al siglo V a.n.e.? Por supuesto. Nuevamente nos
trasladamos a la India, cuya tradición filosófica se remonta a varios milenos
antes de Cristo. La obra titulada Bhagavad Gîta es uno de los tratados más
importantes de filosofía ética. Las llamadas Máximas de Ptahotep son
pensamientos de ética política del segundo milenio a.C., perteneciente a
Imperio Nuevo de la civilización del Antiguo Egipto. Estas máximas o
instrucciones conforman un tratado coherente que integra psicología, ética y
política en una visión filosófica sobre la labor del funcionario público.
Y, por último, no podemos dejar de
señalar que la filosofía no es sólo una disciplina académica ni científica, si
bien, puede apoyarse en el método científico y en una institución oficial.
Filosofar, al decir de Platón y Pierre Hadot, entre muchos otros, es una
actitud vital en la que el asombro, la epojé y la curiosidad innata en todo ser
humano, conducen a un enfoque de la realidad inmediata como la parte de un
todo. Vemos una nube en el cielo empujada por las corrientes de aire y nos
preguntamos, como un niño “¿por qué no se cae?”, a la vez que inmediatamente
rozamos otra pregunta “¿es que hay algo que sostiene el cosmos?”. Esta actitud
es universal y atemporal. En todo tiempo y lugar, el hombre ha poseído esta
actitud natural que llamamos filosofía.
En conclusión, tenemos que reconocer
que no podemos afirmar cuándo ni dónde comenzó el hombre a hacer filosofía. Tal
vez, el filosofar sea consustancial a lo humano.
Francisco Capacete
Filósofo
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