miércoles, 24 de octubre de 2012

SILENCIO SINFÓNICO


En una sociedad como la actual tan llena de cosas, tan repleta de aparatos, tan marcada por los ruidos que no cesan, pareciera que el silencio solamente puede significar vacío, fracaso o vergüenza. Y, por lo tanto, no es de extrañar que se evite el silencio y que ante la amenaza de su llegada se acuda desesperadamente a llenarse de lo que sea.

Sin embargo, el silencio es mucho más de lo que aparenta. Todo da comienzo en el silencio. Nos enseñan los astrofísicos, ese tipo de científicos que están todo el día en las estrellas, que antes de que se iniciara el universo que conocemos solamente había silencio. ¡Y qué maravillas salieron de él! En el silencio el músico capta los sentimientos que sonarán más tarde en los instrumentos y ¡qué maravillas han compuesto los tocados por la mano de la musa inspiración! En el silencio hay paisajes éticos de verdadera belleza, como el perdón, la comprensión, el sentido común, la bondad y la serena justicia. En el silencioso vientre de la madre se mece el milagro de la vida. El invierno se nutre de silencios, pues en la aparente inactividad bulle lentamente el germen de la primavera.

Naturalmente que no podemos convivir ni relacionarnos sin hablar. Estas palabras no son una loa a la vida en silencio. La facultad del habla es un prodigio de la evolución y de los maestros y padres. Es que muchas veces hablamos con palabras vacías, sin alma, porque han surgido del ruido y no del silencio vivo que es la reflexión.

Meditar y reflexionar en silencio es una manera de conocerse a uno mismo. Otorgarle unas horas de vacaciones a la lengua para escuchar la voz del corazón es un buen ejercicio. Así como para que la flecha salga con fuerza del arco es necesario tensar la cuerda hacia atrás y esperar unos segundos de tensión tranquila, para que nuestras palabras broten con color y fuerza es imprescindible agantar los pensamientos unos instantes en la mente, con la sana tensión de la vigilancia interior. Así podemos elegir las mejores palabras, aquellas que expresen de la mejor manera lo que sentimos y pensamos.

Hablar irreflexivamente es como expulsar los alimentos que se comen antes de digerirlos. Hablar irreflexiblemente produce críticas, acusaciones, palabras duras e hirientes. Hablar sin silencio propicia el arrepentirse de lo dicho. Hablar sin meditar es como improvisar tocando un instrumento sin saber música.

El silencio también es señal de vida y riqueza interior, de dominio propio y serenidad. Muchas cosas bellas y necesarias nacen del silencio. Tú y yo hemos nacido del silencio, de esa tierra donde se forjan los sueños, los más maravillosos sueños de hacer un mundo nuevo y mejor.

SEMEJANZAS

Es maravilloso descubrir las semejanzas entre lo pequeño y lo grande.




TIERRA

SISTEMA SOLAR

Tanto el átomo, como el planeta tierra, como nuestro sistema solar, tienen una estructura compuesta de un núcleo, una zona intermedia y una frontera o límite o corteza. Es como si una misma ley natural fuera la responsable de la causación formativa de estas tres estructuras naturales, o sea, la causa que genera las formas básicas de su estructura. De esta manera, la formación de la materia no sería debida al azar, sino a la existencia y acción de leyes regentes de las formas. A estas leyes "responsables" de las formas presentes en la naturaleza les llamó Platón "arquetipos" o "ideas".

jueves, 18 de octubre de 2012

CONAN el cimerio

Unos de los personajes que más he admirado de pequeño ha sido Conan, el cimerio. Este héroe del cómic fue creado por Robert E. Howard y le puso este nombre, que hizo famoso Arnold Schwarzenegger, en honor al insigne escritor Arthur Conan Doyle. Éste último es padre del detective más sabueso de todos, Sherlock Holmes y un defensor del espiritismo, corriente que investigó, llegando a escribir buenos libros de consulta.
Conan, el cimerio, vivió en un tiempo de leyenda, cuando la gran catástrofe de la Atlántida todavía estaba reciente en la memoria. Cimeria es una tierra bárbara, con brujas y magos que hacen de la hechicería su herramienta de dominio sobre súbditos y reyes. En aquella tierra y en aquel tiempo los reyes lo eran por el poder de su espada y no por la sangre que corría por sus venas. Conan sólo cree en el poderoso dios Crom y en su voluntad simbolizada por su espada.
El cimerio es un héroe solitario que tantas veces como lucha por una recompensa, tantas y una renuncia a ellas por honor. Ni aun el oro puede esclavizar a Conan. Mercenario inteligente e incansable, llegó a ser rey por el poder de su espada.

miércoles, 17 de octubre de 2012

VOLUNTARIADO SOCIAL

El voluntariado social es una manera de fomentar los lazos de unión, solidaridad y fraternidad. El que se da a los demás con lo mejor de si mismo, no solamente agranda su corazón, también ensancha el corazón de quien recibe su ayuda. En Es Racó de ses Idees la filosofía se hace amor a través del voluntariado. Es increíble lo que descubrimos al hacer reír a los niños, a los pacientes del Hospital General de Mallorca, a los ancianos: todos los seres humanos somos uno, porque lo que sienten los beneficiarios lo sentimos los voluntarios al instante. Y siempre queda un agradable sabor en el corazón.

jueves, 11 de octubre de 2012

EL VIEJO NUEVO CONTINENTE


En muchos libros de historia y de texto todavía se sigue repitiendo el tópico del Nuevo Continente cuando se refieren a América. Es una suerte de hábito cultural que arrastramos desde el siglo XVI, cuando Europa se entusiasmó ante el descubrimiento de Colón y Américo Vespuccio; el mundo se amplió con la gran novedad geográfica y, por contraposición a la dilatada historia de Europa,  se consideró como “nuevo” al continente americano. Hoy deberíamos saber que este continente es tan antiguo como el resto, al menos es lo que confirman las investigaciones de Wegener y otros. No se puede hablar de América como un continente nuevo. Sin embargo, el tópico sigue repitiéndose.
         Pero, ¿acaso las civilizaciones precolombinas son tan antiguas como la sumeria o la india? Hasta hace unos treinta años, podía considerarse que la civilización en suelo americano era más reciente que en África y Asia. No obstante, la presencia humana está datada del 30.000 a.d.C. y no en el norte, donde se supone que comenzó la colonización de América procedente de Asia; los restos más antiguos se han hallado en el sur de Sudamérica (Monte Verde, Chile). La agricultura y la ganadería surgen en América a la par que en otros continentes. Alimentos fósiles de maíz, calabaza, patatas, animales domésticos y otros han sido encontrados en Mesoamérica y Suramérica con dataciones de hasta hace diez mil años. La civilización de Caral en Perú data de hace más de 5.000 años. Si tenemos en cuenta que los indicios de ciudades más antiguas en otras partes del mundo son las de Çatal Höyük  en Anatolia (5.000 a.d.C. aprox.), y Harappa o Mohenjo-Daro en el subcontinente indio (3.500 a.d.C. aprox.), tampoco se puede seguir afirmando que América es el “nuevo continente”.
         Las civilizaciones más conocidas de América son, sin duda, la azteca, la maya y la inca, pero no son las más antiguas. Más bien, son las últimas civilizaciones de la América Antigua. Mucho antes que ellas encontramos ya asentadas y desarrolladas las culturas olmeca, tolteca, chavinense, la de Huaca Partida, wari y tiahuanacota, entre muchas otras. Los toltecas fueron los predecesores de los aztecas o mexicas, quienes fundaron Teotihuacán, la “Ciudad donde los hombres se preparan para ser dioses”. Los olmecas dejaron el misterio de sus colosales cabezas esculpidas con facciones negroides, como si sus ancestros hubieran sido habitantes del África subsahariana. La cultura de Chavín de Huantar la conocemos principalmente por las ruinas de su “ciudad santa”, un centro ceremonial que maravilla por la disposición circular de su plaza central, el sistema hidro-acústico con que imitaban los rugidos del dios Jaguar y los pasadizos subterráneos donde se halla, enigmáticamente clavado, el Lanzón de Chavín. Tiahuanaco, en el altiplano boliviano, es una de esas ruinas arqueológicas que desprende misterio y enigma por los cuatro costados. ¿Quiénes lo construyeron? ¿Qué representa la llamada Puerta del Sol? Si se encuentra a más de 70 kilómetros del lago Titicaca, ¿por qué construyeron un puerto?
         Los vestigios arqueológicos de todas estas culturas que precedieron a aztecas, mayas e incas, son de fecha incierta, no se han podido datar directamente, sino con medios indirectos, esto es, datando restos orgánicos o cerámicas encontrados en las ruinas. Bien podría ser que esos restos datables pertenecieran a una ocupación más moderna que la época de la construcción principal. De hecho, todos los centros sagrados de la América Precolombina han sido reutilizados, reformados y reactivados muchísimas veces. Incas y aztecas, cuando entraron en escena en la historia, ya encontraron centros sagrados que consideraban muy, muy antiguos, del mismo modo que los romanos continuaron el culto en templos y centros de peregrinación anteriores a ellos que consideraban sagrados, como, por ejemplo, el templo de la diosa Fortuna en Palestrina.
         Y los descubrimientos no han terminado. Seguramente que en los próximos años saldrán a la luz restos arqueológicos mucho más antiguos que los hallados en Caral. Si la presencia humana es de al menos 32.000 años, el homo sapiens habrá tenido tiempo suficiente para generar culturas de remota antigüedad y quién sabe de qué extraordinarias características. Porque hay algo que nos asombra: cuánto más antigua es una civilización, más refinada, más ética y más espiritual aparece. ¿Serán nuestras fantasías traspasadas a la historia? O, más bien, ¿son un ejemplo de lo que la humanidad presente debe recuperar?

jueves, 4 de octubre de 2012

PLATONOMANÍA

Uno de los filósofos que más ha fascinado en los últimos 2.500 años ha sido, sin duda, Aristocles de Atenas, más conocido por su apodo gimnástico, Platón. Su vida está llena de episodios extraordinarios, más propios de un hombre de acción que de un pensador. Pero es que el filósofo griego no fue un teórico de las ideas, sino que se entregó de lleno a promover un cambio en aquel mundo clásico que se deslizaba casi irremediablemente hacia la decadencia. En su juventud, además de estudiar a los clásicos del momento, Homero y Hesiodo fundamentalmente, se preparó para participar en las Olimpíadas, logrando algunos triunfos. Luego se adentró en las artes y, más en concreto, en el teatro, componiendo algunas tragedias de gran calidad literaria. Pero comprobó con tristeza que tanto en los Juegos Olímpicos como en el teatro se iba dejando de lado el ideal griego de la excelencia, el aristos. Por esta razón, cuando conoció a quien más tarde se convertiría en su maestro, Sócrates, quien le inició en la filosofía como modo de vida, quemó todas las obras de teatro que había escrito y se dedicó a conservar el sentido de lo justo, lo bello, lo válido y lo verdadero, para que no desaparecieran de la vista de los hombres. 
Sin embargo, este propósito no iba a ser fácil, se ganaría las críticas de muchos de sus conciudadanos, como comprobaba que ocurría con Sócrates. No se amedrentó, viajó a Egipto para forjarse un carácter resistente ante las adversidades, dado que en el País del Nilo existían centros de sabiduría donde enseñaban a dominarse a uno mismo, a poder ser dueño de uno mismo y no dejarse esclavizar por las circunstancias. Muchos años pasó entrenándose en Heliópolis y a la vez investigando las leyes de la naturaleza para poder ofrecer al mundo una de las filosofías más espectaculares que han salido a la luz.
Una vez de regreso en Atenas, fundó la Academia, una escuela de filosofía que perduró durante casi mil años. Allí enseñó y escribió. Allí preparó a sus discípulos para que pudieran gobernar con justicia. Y así la Academia se convirtió en un foco de conocimiento que irradiaba continuadamente la luz de los grandes ideales.
¿Cómo luchó Platón contra la crisis del mundo griego? ¿Cómo combatió el escepticismo, el mercantilismo, la corrupción de los gobernantes? ¡Con las ideas! Y, ¡qué ideas! 
El mito de la caverna como una alegoría que expresa la imperiosa necesidad de la educación del pueblo para no ser manipulado. Platón dedicó gran parte de sus diálogos a la paideia, a la educación. Esta idea ha inspirado a todos los pedagogos que se han preocupado por el bienestar de la sociedad. 
La inmortalidad del alma, demostrada de mil maneras diferentes, fue y es la enseñanza que  otorga sentido a la vida.
El conocimiento que, según el divino Platón, debe basarse en recordar las esencias y no en reunir en la cabeza gigas de información. 
El diálogo como forma de encontrar juntos la verdad que hay más allá de cada uno.
Es el momento de reivindicar a Platón como el filósofo anti-crisis. Sus ideas son herramientas eficientes para reorientar la vida de los seres humanos. Cuando casi todo a nuestro alrededor se quiebra y se rompe, cuando la corrupción, la falta de educación, el sinsentido, se adueñan de todo, llega el momento de buscar el sentido perdido de la vida. Llega el momento de rescatar aquellos ideales que desde hace dos milenios y medio han sobrevivido a todas las edades medias, a todas las crisis y a todos los amos de la caverna.
En su diálogo sobre la Justicia y el Estado, Platón propone que los gobernantes no deben cobrar por ejercer sus cargos. El estado les facilitará la manutención y el alojamiento. Pero no pueden tener ganancias de ningún tipo. Sólo con aplicar esta recomendación platónica, gran parte de la corrupción actual desaparecería, porque la inmensa mayoría de los políticos saldrían huyendo de los parlamentos y los consistorios. ¡Nos quedaríamos sin políticos! ¡Podríamos comenzar de nuevo!
¡Ea, por el perro, dialoguemos nuevamente con Platón!